Se titula Clímax pero podría llamarse “Quemalassonlasdrogasminiñomiraquetelotengodicho”. Aún así, la película tiene la virtud de mostrarte lo que en cine aún no habías visto, que no es poco. Está en Filmin y fue la ganadora del festival de cine de Sitges.

Adoro eso que llaman cine “inmersivo”, como es el caso de está película del francés Gaspar Noé, en este caso inmersión a estados descontrolados de la mente que provocan conductas impredecibles.
– ¿Es terror?
– Es tanto de terror que no te das cuenta de que lo fue. Los diálogos de los chicos y las chicas son extraordinariamente veraces, naturales. Crean intriga y te predisponen para lo que no va a pasar.
– ¿Y ese principio como de documental?
– Igual. Es parte del juego, para que asimiles que lo que vas a ver podría estar siendo una experiencia real. La gran mentira del cine.
– Buñuel dijo que el cine era el arte en que más lejos está lo que se hace de las posibilidades que brinda. ¿Cree que está película va más allá?
– ¿Usted dónde estudió, señorita?
– ¿Está tratando de ligar conmigo?